La teoría de Carlota Pérez sobre las revoluciones tecnológicas ha sido el centro de atención en dos artículos recientes que analizan cómo las innovaciones tecnológicas pueden afectar la economía y la sociedad. Uno, escrito por Jerry Neumann en Reaction Wheel, y otro por Ben Thompson en Stratechery. Ambos autores se basan en la teoría de Pérez para analizar las fases de innovación y sus implicaciones en el mundo empresarial y económico. En el año 2023, todo parece indicar que la inteligencia artificial (IA) ya es la próxima ola tecnológica en sus primeras fases.
Las cuatro revoluciones tecnológicas anteriores a la IA
La tesis de Pérez se basa en más de 200 años de historia y el análisis de patrones de cuatro revoluciones tecnológicas:
- La Revolución Industrial comenzó en Gran Bretaña en 1771, con la apertura del molino de Arkwright en Cromford.
- La Era del Vapor y los Ferrocarriles comenzó en el Reino Unido en 1829, con la prueba de la máquina de vapor ‘Rocket’ para el ferrocarril Liverpool-Manchester.
- La Era del Acero, la Electricidad y la Ingeniería Pesada comenzó en los Estados Unidos en 1875, con la apertura de la planta siderúrgica Carnegie Bessemer en Pittsburgh, Pensilvania.
- La Era del Petróleo, el Automóvil y la Producción en Masa comenzó en los Estados Unidos en 1908, con la producción del primer Ford Modelo-T en Detroit, Michigan.
- La Era de la Información y las Telecomunicaciones comenzó en los Estados Unidos en 1971, con el anuncio del microprocesador Intel en Santa Clara, California.
El argumento de Pérez fue que las cuatro revoluciones tecnológicas que precedieron a la Era de la Información y las Telecomunicaciones siguieron un ciclo similar:
Fase de instalación y fase de despliegue
Según la teoría de Pérez, las revoluciones tecnológicas pasan por dos fases: la fase de instalación y la fase de despliegue. Durante la fase de instalación, se producen avances tecnológicos importantes, mientras que en la fase de despliegue, las tecnologías se difunden y adoptan ampliamente, lo que lleva a un crecimiento económico sostenido y la creación de empleo.
Punto de inflexión o cambio de paradigma
Según la teoría de Carlota Pérez, el punto de inflexión entre las dos fases de instalación y despliegue se denomina «momento de oro» o «cambio de paradigma». Este punto marca el final de la fase de instalación, caracterizada por una rápida innovación tecnológica, y el comienzo de la fase de despliegue, que se centra en la difusión y adopción generalizada de la tecnología.
El punto de inflexión generalmente ocurre cuando se ha alcanzado un nivel crítico de adopción y madurez tecnológica, lo que permite que la tecnología pase de ser una novedad a convertirse en una parte esencial de la infraestructura económica y social. Este cambio de paradigma suele ir acompañado de una reorganización de las estructuras económicas y sociales, así como de un crecimiento económico sostenido y la creación de empleo.
Durante el punto de inflexión, las empresas y los gobiernos pueden comenzar a centrarse en aprovechar al máximo las tecnologías existentes, mejorando la infraestructura para facilitar su adopción y promoviendo su uso en toda la economía. También es un momento en el que las nuevas oportunidades de negocio y de inversión pueden surgir en torno a la tecnología en cuestión.
Es importante destacar que el punto de inflexión no implica el fin de la innovación. Aunque la fase de despliegue puede ser menos revolucionaria que la fase de instalación, todavía hay espacio para la innovación en términos de aplicaciones y modelos de negocio que aprovechen las tecnologías existentes de maneras nuevas y creativas.
La irrupción de la tecnología de inteligencia artificial (IA)
La irrupción de la tecnología de inteligencia artificial (IA) en la economía global podría representar el comienzo de una nueva fase de instalación en la teoría de Carlota Pérez. A medida que la IA avanza rápidamente y comienza a transformar múltiples sectores, se está volviendo cada vez más evidente su potencial para impulsar un cambio de paradigma. Con la IA, la automatización y el aprendizaje automático están cambiando la forma en que trabajamos, comunicamos e interactuamos con el mundo, lo que podría marcar el inicio de una nueva revolución tecnológica.
A medida que la IA avanza hacia el punto de inflexión entre las fases de instalación y despliegue, las empresas y los gobiernos tendrán que centrarse en adoptar y adaptarse a esta tecnología emergente. La infraestructura necesaria para soportar y aprovechar al máximo las aplicaciones de inteligencia artificial deberá desarrollarse y mejorarse, abriendo nuevas oportunidades de inversión y crecimiento económico.
Al mismo tiempo, es crucial mantenerse al tanto de las innovaciones en el campo de la IA y estar dispuesto a cambiar y adaptarse a medida que la tecnología evoluciona.
Si bien es posible que aún no hayamos llegado al punto de inflexión en la adopción de la IA, es fundamental estar preparados para este cambio de paradigma y capitalizar las oportunidades que esta nueva ola tecnológica ofrece.
Fuentes
The Death and Birth of Technological Revolutions <https://stratechery.com/2021/the-death-and-birth-of-technological-revolutions/>
Tipos de tecnologías según la curva en S <https://www.perecondom.com/2018/01/02/tipos-de-tecnologias-segun-la-curva-en-s/>
The Deployment Age <http://reactionwheel.net/2015/10/the-deployment-age.html>